La otoplastia es un procedimiento para corregir múltiples deformidades auriculares, pero principalmente esta dirigido a las personas que tienen orejas prominentes o “en pantalla”, es decir, cuando las orejas parecen estar muy separadas del rostro. Suele practicarse después de los 7 años, puesto que a esta edad se considera que las orejas ya han alcanzado un alto nivel de desarrollo, con pocos cambios posteriores.
Este procedimiento se puede realizar a partir de los 7 años, puesto que a esta edad los cartílagos de las orejas han alcanzado un mejor desarrollo, con una mayor madurez de los tejidos y además, probablemente una mayor colaboración del paciente, lo que tiende a producir mejores resultados, y con poca probabilidad de cambios al futuro. Evidentemente, también puede realizarse en adultos y pacientes mayores sin riesgos adicionales asociados. En estos casos, de hecho , se hacen bajo anestesia local. Con la otoplastia se moldea el cartílago logrando una buena simetría de las orejas, en relación con el rostro del paciente, de esta forma los pacientes que se someten a este procedimiento mejoran su imagen y por ende la confianza en sí mismos. Para realizarse la cirugía de orejas, es necesario tener una valoración física con su cirujano plástico, quien examinará la estructura de sus orejas, evaluará las necesidades de realizar una cirugía, responderá sus dudas, le comentará las ventajas y posibles complicaciones de la cirugía, los costos y le recomendará algunos exámenes de laboratorio que le permitan valorar si usted cuenta con el estado de salud apto para esta cirugía.
El procedimiento puede realizarse a cualquier edad después de los 7 años cuando los cartílagos se han desarrollado completamente. Es recomendable realizarlo a temprana edad ya que los resultados suelen ser mejores debido a que los cartílagos una vez finalizan su crecimiento son fáciles de manipular y moldear. Además de esta manera se evita gran parte del impacto negativo generado por las burlas frecuentes hacia estos niños generalmente en el colegio. Esta intervención se lleva a cabo bajo anestesia local y en algunos casos se requiere una leve sedación. Se debe realizar unos exámenes previos de sangre para verificar las condiciones adecuadas de salud para someterse al procedimiento y así evitar posibles complicaciones.
La Otoplastia es un procedimiento que representa un bajo riesgo para la salud de un paciente si se realiza bajo las condiciones salubres necesarias y con cirujanos especialistas certificados. Las complicaciones en esta clase de procedimientos son muy infrecuentes pero pueden darse en un bajo porcentaje como infecciones, hematomas o problemas de cicatrización que requieran revisiones.
Es un procedimiento de carácter ambulatorio que requiere de un par de días de reposo en casa, durante el cual no deben hacerse esfuerzos físicos. El paciente sale de la cirugía con unos vendajes elásticos que deben permanecer 3 a 4 días. Posteriormente el cirujano va a recomendar el uso día y noche de balacas protectoras durante unos 20 a 30 días. Es importante evitar la presión excesiva sobre las orejas en las primeras semanas. Este procedimiento deja una cicatriz muy fina, en el pliegue posterior de la oreja, en un lugar donde es muy difícil que alguien la observe. No es necesario evitar las actividades físicas cotidianas. Sin embargo, se recomienda proteger las orejas evitando deportes de contacto durante un mes.
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