El ácido hialurónico es uno de los tratamientos más populares para corregir las ojeras. Se administra directamente en la zona a tratar rellenando, para dar volumen en las cavidades de la ojera, esto ayuda a suavizar el área y a mejorar la apariencia de la piel, también puede ayudar a reducir la hinchazón y las bolsas debajo de los ojos.
Es importante advertir que es necesario hacer una evaluación clínica cuidadosa de cada persona, para definir las causas de las ojeras, puesto que en algunos casos es predominantemente hiperpigmentación dérmica. Es estas condiciones clínicas de pigmentación oscura o parda de la piel, los resultados pueden ser menos adecuados, es decir, los fillers como el acido hialurónico o los cristales de hidroxiapatita van a tener menos efectos.
En casos como las pigmentaciones, es menester tener evaluación por dermatología, para implementar tratamientos despigmentantes. Sin embargo, vale la pena recalcar que son situaciones de difícil respuesta y con frecuencia pobres resultados.
El ácido hialurónico también puede ayudar a mejorar el tono de la piel, aclarando el color y dando a la zona un aspecto más saludable. Los resultados del tratamiento con ácido hialurónico pueden durar de 6 a 18 meses. La zona de las ojeras requiere un ácido hialurónico de baja densidad que se absorbe gradualmente con el tiempo, lo que significa que los resultados son naturales y duraderos.
Los rellenos con ácido hialurónico deben ser aplicados por un cirujano plástico o un dermatólogo ya que es un tratamiento invasivo y el procedimiento debe realizarse con precisión para obtener los mejores resultados. Es necesario tener una comprensión profunda de la anatomía facial para orientar adecuadamente al paciente de lo que debe o no hacerse en en el rostro. Antes de recibir la aplicación, es importante discutir sus objetivos estéticos y asegurarse de que el tratamiento es seguro para usted.
Después de recibir un tratamiento con ácido hialurónico, es importante seguir todas las instrucciones de su médico para garantizar el mejor resultado posible, esto puede incluir el uso de hielo para aliviar el enrojecimiento y la hinchazón, así como la aplicación de cremas para mantener la piel hidratada. También es importante no exponerse al sol durante al menos 24 horas para evitar irritación.
El ácido hialurónico dura entre 6 y 18 meses, dependiendo de la cantidad usada, la ubicación del tratamiento y el tipo de ácido hialurónico usado. Algunos tipos de ácido hialurónico son más duraderos que otros.
Los efectos secundarios más comunes del ácido hialurónico son enrojecimiento, hinchazón, picazón e inflamación en el área de la inyección; estos síntomas suelen desaparecer en un par de días. Algunas complicaciones son más serias aunque de muy baja ocurrencia, tales como necrosis de piel, ceguera, etc.
Las contraindicaciones generales del ácido hialurónico son el embarazo, la lactancia, la alergia al ácido hialurónico, cualquier infección activa en el área de la inyección, no debe usarse en personas con enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide o la esclerosis múltiple, debe evitarse también en personas con trastornos de coagulación sanguínea, ya que puede aumentar el riesgo de sangrado. Se recomienda una evaluación médica antes de considerar el tratamiento con ácido hialurónico.
Si una persona queda inconforme con los resultados de un tratamiento con ácido hialurónico, es posible corregirlo, existen opciones para disolverlo o para mejorar los resultados. Es importante hablar con el profesional tratante para buscar la mejor solución posible.
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